Cirugía e implantes detales

La cirugía bucal es la especialidad más antigua reconocida dentro de la odontología y se encarga de diagnosticar y tratar quirúrgicamente las enfermedades, traumas y defectos de los dientes, la boca, los maxilares y sus tejidos contiguos tanto en su aspecto estético como funcional.

Aunque la finalidad de la Cirugía bucal puede variar, las técnicas empleadas serán muy semejantes para llevarla a cabo.

Algunos de sus propósitos serán:
  • La extracción de dientes incluidos o semi-incluidos en el espesor del hueso.
  • La extracción de restos de raíces fracturadas en el hueso.
  • Eliminación de lesiones radiculares (granulomas o de quistes en la zona periapical).
  • La extirpación de quistes maxilares.
  • Conformación del hueso y la encía para recibir adecuadamente prótesis dentarias (cirugía pre protésica).
  • La eliminación de frenillos labiales o linguales que produzcan alteraciones en la posición de los dientes o en el habla.
  • La toma de tejidos dentarios para analizarlos, entre otros.
Extracción de dientes incluidos.

Los dientes incluidos son dientes que no han erupcionado durante su periodo normal y permanecen dentro del hueso, parcial o totalmente.

Cuando nos encontramos con uno o varios dientes incluidos, podemos tratarlos de tres formas diferentes:

  1. Abstención terapéutica
  2. Extracción quirúrgica
  3. Recolocación del diente incluido en la arcada dentaria

La abstención terapéutica no suele ser aconsejable, ya que todo diente incluido es susceptible de producir patología (de tipo infeccioso, quistes, reabsorción de las raíces de los dientes adyacentes, etc.) Sin embargo, existen situaciones en las que deberemos adoptar esta conducta y hacer controles periódicos del paciente.

La extracción quirúrgica se realizará en último caso, cuando no se pueda llevar a cabo un tratamiento de ortodoncia para colocar el diente en su sitio o exista una patología asociada a la inclusión (quistes voluminosos, infección, reabsorción de las raíces de dientes vecinos) o una enfermedad general grave.

El tercer molar incluido, sobre todo el inferior, tiene una consideración especial, ya que su extracción ha de plantearse como primera opción de tratamiento.

La recolocación del diente incluido en la arcada dentaria es el tratamiento de elección para todo diente incluido que tenga importancia estética y funcional, y puede llevarse a cabo mediante dos tipos de procedimientos:

  1. Quirúrgico – Ortodóncico: Es un procedimiento que combina cirugía y ortodoncia en el tratamiento.
  2. Quirúrgico: Requiere sólo Cirugía.
Extracción de cordales incluidos (Muelas del juicio).

Los problemas en la erupción de los cordales son muy frecuente debido a que en la evolución del hombre, el tamaño del maxilar y de la mandíbula ha ido disminuyendo más rápidamente que el número de dientes. Esto produce una falta de espacio que impide la normal erupción de éstos, los últimos en brotar.

Fenestración dentaria.

La fenestración dentaria consiste en eliminar el hueso y la mucosa alrededor de un diente incluido con el fin de liberar y visualizar la corona del diente, permitiendo al ortodoncista colocar un bracket y llevar este diente a la arcada.

Generalmente se realiza en los caninos, que después de los cordales, son los dientes que con mayor frecuencia presentan problemas de erupción quedando incluidos en el hueso.

¿Por qué se debe hacer la fenestración en los caninos incluidos?.

Los caninos son dientes muy importantes en la arcada dental y guían a la mandíbula en sus movimientos, por lo que se deben hacer todo lo posible para poder lograr su erupción. La extracción del canino incluido se debe considerar como la última alternativa, cuando el resto de tratamientos para llevarlo al arco hayan fracasado.

Frenillos bucales.

Los frenillos son unos pliegues de la mucosa que unen dos superficies contiguas, y que en determinadas situaciones pueden causar problemas ortodóncicos, fonéticos, periodontales y protésicos, debido a variaciones en su forma, tamaño y posición. Según su localización se clasifican en:

Cirugía periapical.

Algunos pacientes presentan lesiones en el hueso alrededor de una o varias raíces que crecen destruyendo el hueso de soporte del diente y son responsables de dolores e infecciones. Estas lesiones se denominan granulomas y quistes y su origen está en una infección dental crónica (mantenida).

La cirugía periapical consiste en la extirpación quirúrgica de la lesión que se encuentra al final de la raíz del diente, junto con la sección de la parte final de la raíz. Normalmente se acompaña de la realización de una pequeña preparación al final de la raíz seccionada y obturación de la misma con amalgama (“empaste de plata”) o cemento especial.

Torus.

Los torus son unos agrandamientos benignos del hueso que pueden aparecer en la parte interior de la mandíbula o en el paladar. Este agrandamiento puede consistir en una única formación ósea o múltiples “callos” óseos.

La extirpación habitualmente no es necesaria, a menos que interfiera con la colocación de una prótesis removible. Con menor frecuencia, los torus pueden hacerse excesivamente grandes, produciendo alteración en el habla y ulceración de la mucosa. En este caso también estaría indicada su extirpación.